domingo, 30 de agosto de 2009

CAMPAÑA ESCRIBIR SIN FALTAS

¿Qué opinan de esta campaña? Visiten el blog ERES LO QUE ESCRIBES ERES COMO ESCRIBES en

http://escribesinfaltas.blogspot.com/

Con frecuencia nos preguntan por qué el español es la única lengua que emplea el signo de interrogación inicial, y cuál es el origen del signo final d


Con frecuencia nos preguntan por qué el español es la única lengua que emplea el signo de interrogación inicial, y cuál es el origen del signo final de interrogación empleado en todas las lenguas europeas modernas. La respuesta nos la trajo al Foro Cervantes María López-Contreras González, quien investigó el tema en la red.

1º) - En la mayoría de los idiomas se utiliza un único signo de interrogación al final de la frase interrogativa: How old are you? (Inglés: ¿Cuántos años tienes?). Este fue el uso habitual también en español, hasta mucho después de que la segunda edición de la Ortografía de la Real Academia, en 1754, declarase preceptivo iniciar las preguntas con el signo de apertura de interrogación invertido, (¿) y terminarlas con el signo de interrogación ya existente (?) – ¿Qué edad tienes?–, al tiempo que se ordenaba lo mismo para los signos de admiración (¡) y (!). Este criterio, en realidad, no se generalizaría hasta casi un siglo más tarde, ya que desde esa fecha de mediados del siglo XVIII hasta mediados del XIX la Real Academia Española no tuvo, ni mucho menos, el carácter corporativo e institucional que le iba a conferir la monarquía isabelina posteriormente. Las imprentas siguieron editando según la costumbre: ubicaban solamente un signo al final de las frases interrogativas o exclamativas. Si los signos iniciales se extendieron en las tipografías, no se debió a que el español tenga el problema de que no se sabe en qué momento se inicia la frase interrogativa o admirativa (la sintaxis de otras lenguas también desconoce ese momento), sino al carácter forzoso que dio la monarquía a los criterios de la Real. La norma de los signos de interrogación y exclamación iniciales fue impuesta, simplemente, de la mano de la Gramática oficial de la institución monárquica. Su carácter compulsorio estaba limitado al muy reducido ámbito idiomático de España (ver, por ejemplo, la resistencia de Chile). Una solución intermedia muy corriente consistió en utilizar los signos de apertura sólo cuando el enunciado era largo, o con riesgo de ambigüedad, pero no para las frases breves y claramente interrogativas, como Quién vive? [cita requerida].>>
http://es.wikip edia.org/wiki/Signos_de_interrogaci%C3%B 3n

2º) - Qué son los signos de puntuación y cuál es su historia.

Los signos de puntuación son herramientas específicamente creadas para ayudar a los lectores a comprender el significado de los textos. En los inicios de la escritura alfabética los textos eran muy diferentes de los actuales; estaban compuestos por letras que formaban una aglomeración consecutiva y compacta, en la cual no había ninguna puntuación. Esto hacía tan difícil su lectura que era indispensable leerlos en voz alta, para ir demarcando con el tono de la voz las palabras y las frases.

Fueron necesarios por lo menos quince siglos para que se produjera la separación gradual de las letras de los textos en palabras y frases. En los comienzos de la Edad Media se adoptó la costumbre de poner las frases en líneas separadas; luego aparecieron la coma y el punto; posteriormente se adoptaron las mayúsculas iniciales, los paréntesis, la separación entre párrafos, hasta llegar a la diversidad de signos que tenemos hoy. Este desarrollo de la puntuación hizo posible la aparición de la lectura silenciosa a la que ahora estamos habituados.

La historia de la escritura en Occidente subraya un hecho clave: el lector es quien se beneficia del buen uso de los signos de puntuación. Cuando un autor, al escribir un texto, cuida la puntuación, no lo hace por un vano alarde de erudición sino porque tiene interés en que sus lectores entiendan lo que dice. El mal uso de la puntuación indica, por contraste, que posiblemente el autor no tiene claro lo que quiere decir.

(...)

3. Signo de interrogación.- Origen

El origen del signo es oscuro y se han formulado varias hipótesis[2]:

- Puede ser una estilización de Qo, abreviación de la palabra latina quaestio.

- Puede ser una modificación del signo de interrogación griego, que en su forma es idéntico a nuestro punto y coma.

- También se ha asociado el signo a la notación musical de las neumas.

- Parecido a la anterior es la hipótesis de que expresa gráficamente la entonación del hablante.

- Finalmente, hay quienes atribuyen la invención a personas concretas de la Antigüedad o la Edad Media.>>

http://www.wikilen gua.org/index.php/Interrogaci%C3%B3n

«Cruzados» ortográficos reivindican en las calles el uso de la tilde


Natalia Kidd, EFE

Un grupo de jóvenes latinoamericanos ha iniciado una «cruzada» por la reinserción del acento gráfico en la vía pública, donde señalan su ausencia con un toque de buen humor y rebeldía ante la incorrección ortográfica en las calles.

La movida nació en junio pasado en México, por iniciativa del joven vasco Pablo Zulaica Parra, y pronto se extendió a Perú y Argentina, donde se multiplican las «intervenciones» en todo tipo de carteles donde las tildes brillan por su ausencia.

Apenas detectan la falta, estos «cruzados ortográficos» pegan un acento de papel visible en el que además se explica la regla ortográfica violada.

Cada acto de reivindicación gramatical es fotografiado y las imágenes se suben a los diversos blogs de la iniciativa «Acentos perdidos», donde además se generan interesantes debates sobre el español, una iniciativa que también suma adeptos a través de la red social Facebook.

«El principal objetivo es que la gente tome conciencia de la importancia de usar bien nuestra lengua», dijo a Efe Rodrigo Maidana, un estudiante de Economía de la ciudad argentina de La Plata que comanda la iniciativa en su país.

Como regla, estos jóvenes solicitan autorización para pegar las tildes siempre que sea posible, pero si se trata de anuncios comerciales o políticos lo hacen sin permiso pues «semejante afrenta, con tantos ojos responsables de ese mensaje, merece ser visiblemente señalada», dijo a Efe Zulaica, redactor publicitario que vive en México.

Falta de educación, desinterés y malas costumbres son algunas de las razones que estos jóvenes descubren para el abandono progresivo de las tildes, agravado por una no muy buena ortografía entre los publicitarios.

Las mayúsculas, por ejemplo, son candidatas usuales a la ausencia de tilde, y por argumentos históricos, como que las máquinas de escribir no permitían su acentuación y que a los impresores se les salían los tipos de la tilde de los rótulos, se asentó la falsa norma de que las mayúsculas no llevan acento gráfico.

A diferencia de otras «intervenciones urbanas» como los grafiti o los esténciles (técnicas decorativas con plantillas), estos chicos no actúan furtivamente.

«Es bueno que la gente te vea e intercambiar opiniones. La gente principalmente se sorprende. Esta cruzada no trata de hacer enojar a nadie, al contrario, trata de sacar una sonrisa y de ayudar a mejorar el uso de nuestra lengua», dijo Maidana, de 18 años.

Según Zulaica, de 27 años, el proyecto «tiene un componente lúdico muy importante» y «es una 'desacademización' de lo académico, como un vandalismo suave que conserva todo el rigor en el fondo. Gusta a grafiteros y a editores y lingüistas. Además, tiene un punto de activismo que nos hace sentir como ciudadanos que nuestra voz sí puede oirse».

Para los dubitativos, los blogs de «Acentos perdidos», http://acentosperdidos.blogspot.com, tienen un enlace a la Ortografía de la Lengua Española de la Real Academia Española.

Aún así, estos defensores de la tilde no tienen nada de dogmáticos y hasta se muestran comprensivos con el colombiano Gabriel García Márquez, que en 1997, en el primer Congreso Internacional de la Lengua, celebrado en México, sugirió poner «más uso de razón» en los acentos escritos como parte de su polémica propuesta para «jubilar la ortografía», que tanto revuelo generó.

«García Márquez emitió una opinión que debe respetarse, porque sinceramente a todos nos gustaría una lengua más sencilla, como la que él pide», señaló Maidana, hijo de periodistas y que asegura que «desde chiquito» siempre tuvo «un gran interés por la ortografía».

Como parte de esta iniciativa, la joven peruana Lorena Flores Agüero ha creado el «tildetón», una salida planificada para pegar acentos en las calles que ya se organizó en México y Perú y que próximamente se hará en Argentina.

«Acentos perdidos» también organiza «cruzadas puntuales» a favor de la acentuación; la primera se hizo en Lima y tuvo como blanco al logotipo carente de acento gráfico del grupo español Telefónica, al que acusan de ser «uno de los mayores irresponsables en el uso de la tilde».

Prevén desaparición de 34 lenguas en Bolivia


De las 34 lenguas que actualmente se hablan en Bolivia, veinticinco afrontan un proceso irreversible de extinción que desembocará en su desaparición total en los siguientes años. «Antes de 2100 —según afirma el lingüista holandés Pieter Muysken— quedarán sólo nueve».

Junto a un equipo de expertos bolivianos y holandeses, Muysken efectúa desde 2000 una amplia investigación lingüística en Bolivia, fruto de la cual el pasado 19 de agosto presentó el libro Lenguas de Bolivia: ámbito andino —escrito junto a Mily Crevels— y que será el primero de una serie de cuatro trabajos previstos para los siguientes años.

«Una de las principales causas —comenta el investigador— que provocan la desaparición de idiomas es la económica, es decir que la falta de recursos y fuentes de trabajo obliga a etnias enteras a emigrar y poco a poco perder sus rasgos culturales e idiomáticos».

El autor explica que para establecer el grado de riesgo de una lengua se debe analizar el porcentaje de hablantes, su edad media, el número de niños que la aprenden, el tamaño del grupo étnico que la practica y su situación social.

«La mayoría de las lenguas nativas de Bolivia —señala Muysken— están seriamente amenazadas. La esperanza es que hasta fines de este siglo (2100) sobreviva apenas el veinte por ciento o un poco más. Calculamos que unas nueve, máximo».

Según el texto presentado por el holandés, los únicos idiomas con potencial para subsistir a un futuro mediato y lejano son: quechua, aymara, chipaya, guarayo, guaraní-chiriguano, weenhayek, tsimane, yurakaré y besiro (chiquitano).

De acuerdo con el experto, para establecer el pronóstico de vigencia de un idioma o dialecto se debe hacer una rigurosa evaluación de datos demográficos. Asegura que «es imprescindible hacer una distinción entre los miembros de la población o etnia y los hablantes que practican la lengua».

«Por ejemplo —agrega Muysken—, hay un caso de una comunidad urus en los Andes de Oruro. Esta etnia, como su lengua misma, se disolvió porque sus habitantes fueron absorbidos por otros grupos, debido a causas socioeconómicas. El nivel del lago Urus en torno al cual vivieron históricamente subió y bajó repentinamente, provocando desórdenes agrícolas. La gente fue abandonando la zona y ahora sólo quedan doce personas auténticamente urus, y ya están altamente influenciados por el aymara».

Una situación similar ocurre con la etnia canichana, ubicada en la región de la amazonia, y de la que ninguno de sus cuatrocientos miembros actuales aprendió su lengua originaria que sí hablaban sus abuelos y antecesores inmediatos.

«Sólo en muy pocos casos —dice el especialista— el número de hablantes es casi igual al número de miembros de la comunidad». Por ejemplo, la población quechua llega a 1.555.641 habitantes en todo el país, de los cuales 1.540.833 hablan efectivamente ese idioma.

El desprecio de la lengua materna es otra de las causas de la desaparición.«En el pasado muchas han sido ‘matadas’ por el menosprecio, porque la gente pensaba que si las hablaban la sociedad iba a tratarlas con menoscabo».

Muysken advierte que los datos y estadísticas que maneja en su libro pueden diferir de otras indagaciones. «Por ejemplo, hay una publicación de Xavier Albó que toma datos del Censo de 2001 y establece la existencia de 150 hablantes de la lengua uru (uchumataqu), aunque nosotros pensamos que ya no hay nadie que lo haga efectivamente. Como en otras consideradas extintas, hay personas que saben palabras y frases, pero no las usan en su comunicación diaria».

Según el experto, hay gente que informa que aún habla su idioma materno cuando en realidad no lo hace, ya que sólo recuerda palabras sueltas.

«Esto causa informes contradictorios, y por eso hay libros que dan por perdido a un idioma mientras que para otros aún está vivo. Lo bueno es que si aún se conoce, aunque sea partes, hay esperanzas de que los comunarios lo reaprendan».

El lingüista asegura que para salvar lenguas en grave riesgo, o por lo menos conservar registros (cuando no grupos que la practiquen), «se tiene que trabajar en la documentación escrita y a través de grabaciones, y en la elaboración de vocabularios que sirvan después para concienciar y enseñar a las comunidad a mantener esta herencia invaluable».

Fuente: elcastellano.org

domingo, 23 de agosto de 2009

CINE Y LITERATURA

Para los que están trabajando con estos dos contenidos, les pasamos un vínculo muy interesate

LETRACELULOIDE -Revista virtual de cine y literatura-. La revista, de acceso libre y gratuito, contiene breves comentarios de distintos profesionales que trabajan en el campo de la cultura, sobre películas basadas en textos literarios. La idea central es que el visitante pueda descubrir o redescubrir algunas versiones fílmicas y textos de diferentes épocas, nacionalidades, valoración crítica o histórica, como, así también, distintos escritores y cineastas.


Para todos aquellos que deseen visitarla o conocer las condiciones de publicación la dirección es: http://letraceluloide.blogspot.com/

miércoles, 5 de agosto de 2009

Kodak se rindió a la tecnología digital: dejará de fabricar el rollo Kodachrome

Aportado por Milagros Moreni Nimer. Fuente: La Capital - Rosario


Kodak anunció ayer que dejará de fabricar el mítico rollo fotográfico Kodachrome, su producto insignia creado hace 74 años.

Kodak, la compañía que hace 100 años popularizó la fotografía de uso doméstico, anunció ayer que dejará de fabricar el mítico rollo fotográfico Kodachrome, su producto insignia creado hace 74 años.

El hecho de que esta empresa haya tomado la determinación de que su histórico producto deje de existir no es una noticia más. Se trata de una firma "formadora de opinión" en el mercado, a la que el resto de las compañías presta mucha atención, y hasta imita.

"Se trata de discontinuar un producto que es un ícono. Pero la mayoría de los fotógrafos manifiesta hoy su preferencia por capturar imágenes con tecnologías más nuevas, como la digital", sostuvo Mary Jane Hellyar, presidente de Kodak Film Photofinishing and Entertainment Group.

En la actualidad, nada menos que el 70% del negocio de la firma proviene de sus ramificaciones digitales, tanto comerciales como de consumo.

"Tenemos planes para mantener el negocio de los rollos de película, aunque lo haremos en tanto nos sea posible", remarcó Heyllar.